Misiones Franciscanas

Las misiones fueron las últimas creadas por la Orden Franciscana a principios del siglo XX en los llamados Territorios Nacionales de Formosa y Chaco con la finalidad de evangelizar a los pueblos originarios de la región. Fueron tres:  Misión Laishí y Misión Tacaaglé en la provincia de Formosa, y misión Nueva Pompeya en Chaco.

En Formosa cada localidad fue adquiriendo una dinámica propia por los vínculos con el entorno y con las localidades cercanas, además del proceso natural de migración de cada región.

Fray Salvador Gurrieri es el último padre franciscano que queda en la provincia de Formosa y tuvimos el honor de hacerle una entrevista en febrero de 2022, en la que comparte episodios importantes de la historia de las misiones.

Nació en Rosario el 6 de setiembre de 1929 e ingresó en la Orden Franciscana en 1947. Fue ordenado sacerdote en 1954 y, en los años ’60, lo trasladaron a la Misión San Francisco de Laishí por el fallecimiento del sacerdote a cargo. Es Capellán de la Policía de la provincia desde 2004.

San Francisco del Laishí

La localidad San Francisco del Laishí se sitúa a 70 km de la Ciudad de Formosa sobre la Ruta Provincial N° 1. Las misiones franciscanas tenían la tarea de evangelizar a las comunidades aborígenes de esta región desde el año 1901, por lo que marcaron fuertemente su historia. Actualmente se puede visitar el convento San Francisco, el convento de las Hermanas Educacionistas y la Capilla Sagrado Corazón de Jesús. Además, se puede recorrer el Museo Histórico con un guía local, muy cerca se encuentra el antiguo Ingenio azucarero que fue polo productivo de todo el norte en sus inicios. También hay un hermoso camping municipal donde se puede apreciar un antiguo puente creado por las misiones, así como un moderno circuito de motos. Algunos operadores turísticos locales ofrecen visitas a sus establecimientos, con paseos a caballo, camping y paseos en kayaks por el riacho El Salado.

Misión Tacaaglé

La Misión Franciscana de Tacaaglé tuvo tres asentamientos. Primero fue fundada en 1901 a orillas del Río Pilcomayo, frente a Gral. Bruguez (Paraguay) por el Padre Fray Terencio Marcucci.

Debido a las inundaciones periódicas ocasionadas por las crecidas del Pilcomayo, en 1902 se trasladó unos 20 km hacia el interior. Posteriormente, la presencia de suelos no aptos para cultivos, las sequías prolongadas y el difícil acceso, obligaron a un nuevo traslado que se inició en 1914 y se concretó definitivamente en 1917 donde sigue hasta la actualidad.